21 de julio de 2022

Adentrándose en la impresión de miniaturas con 3DBreed (I)

Llevo ya unos meses apoyando unos cuantas campañas de micro-mecenazgo. Al principio eran de miniaturas de fantasía, pero recientemente he entrado en cuatro de miniaturas históricas. Se trata de los samurais en 15mm de SMOL miniatures, napoleónicos en 6mm de Henry Turner, griegos y persas en 15mm de 3d Breed y aztecas en 15mm de Red Copper Miniatures. Para algunos todavía queda un largo recorrido para que me ponga con ellos, pero, como me encanta la antigüedad, en cuanto he podido he echado mis manos sobre los 15mm de 3d Breed. 

A decir verdad, cuando vi su primera campaña de March to hell: Rome, he de reconocer que sus miniaturas no me llamaron en absoluto. Aún hoy sigo teniendo mis reparos por su ausencia de cuello, pero decidí darles una oportunidad, sobre todo porque no tengo miniaturas de persas y esta campaña podría ser una oportunidad para hacerme un ejército persa. Además, y eso fue lo que me ganó, era muy probable que desbloquearan macedonios con la sarissa apuntando al enemigo, y ese tipo de miniaturas es muy difícil de encontrar en el mercado, por no decir que, desde la desaparición de Warmodelling, es imposible encontrarlas.

Piqueros macedonios de 3D Breed en 15mm pintados por Dexter Schiller

Al verlos con más detalle noté que estas miniaturas tenían un potencial que no había visto antes. También las vi impresas en el Foro de la Armada y me cambió mi imagen sobre ellas, pensando que merecían una oportunidad. Y así me puse a imprimirlas. Empecé por imprimirlas tal y como vienen en los archivos. Esta prueba ya sabía yo que no me iba a convencer mucho pero había que darles una oportunidad. Efectivamente, impresas tal cual vienen resultan un 15mm demasiado justo e incluso algo pequeño (luego pondré fotos de alguna comparación para que esto se vea mejor). 

Tras haberles dado esta primera oportunidad a escala real noté que había dos problemas. El primero de ellos es la escala, lo cual se podría solucionar fácilmente haciéndolas más grandes. Ésa es la gran ventaja de las impresoras 3D, que estos ajustes menores de tamaño salen perfectamente sin que repercuta en la calidad de la miniatura. El segundo problema, más espinoso, era el de su total carencia de cuello. A ver, en algunos modelos se intuye que el cuello está ahí, pero no siempre. Eso los hace algo chepudos y regordetes, muy caricaturescos. Por ello, empecé por el segundo problema, que requería algo de aprendizaje por mi parte de software. Para ello me vi un par de tutoriales de Blender y Meshmixer y me puse manos a la obra. El modelo inicial era éste.


Así, me puse a editarlo, añadiendo un cuello e intentando cubrir los huecos de las partes que se quedaron descubiertas al levantar la cabeza un milímetro. Ahí es donde empecé a darme cuenta de que la tarea sería mucho más complicada de lo que había previsto, que no era más que cortar el modelo en dos y conectar los huecos. Ahí vi que levantar la cabeza implicaba también algunas conexiones entre el casco y los hombros. Precisamente es hacer ese hueco lo que iba a permitir la que figura tuviera un aspecto más estilizado pero los huecos había que rellenarlos para que eso fuera posible imprimirlo. Aquí está el resultado tras bastantes horas de trabajo, que en gran parte lo fueron de aprendizaje de la herramienta (quien se crea que modelar en 3D es fácil es que nunca se ha puesto delante a hacerlo).


De frente no se observa mucho la diferencia, pero efectivamente ahí está y es más una percepción general que algo muy evidente. Otra cosa que me planteé fue quitarle la lanza para poder poner varillas metálicas, pero al final desistí porque quería ver el resultado completo, aunque es algo que no descarto para el futuro. Aquí pongo las dos miniaturas lado a lado para que se pueda apreciar algo más la diferencia. Arriba está el archivo original y abajo está el archivo modificado. A mi juicio la adición del cuello le da el carácter más estilizado que la miniatura necesita. No sé si eso generará problemas de impresión (aún tengo que hacer la prueba), pero a mi juicio la ganancia es evidente.



Probablemente la tarea adicional que tendría que hacer requeriría no sólo incluir un cuello, que a mi juicio es necesario, sino también alterar ligeramente el modelo para estirar el eje Z y quizá alterar ligeramente el eje X para hacer las proporciones algo más estilizadas. Esto me puso sobre la pista de que quizá, para una escala de 15mm, pudiera resolverse la cuestión solo con alterar las proporciones, sin necesidad de darse el gran trabajo de tener que modificar todos los modelos uno a uno y verificar que no había huecos en ello (y esta segunda tarea es la realmente complicada).

Con esta idea en mente, dejé por el momento la tarea pues el modelado me llevó mucho más tiempo del que me había esperado (y además el trabajo acabó por engullirme). En un futuro post pondré cómo fueron mis pruebas y posibles ideas que se extraen de ello para ver de qué manera imprimir ejércitos de esta marca. 




No hay comentarios: