Caballería hispana

Ahora presentamos la caballería hispana de Aníbal. Estos hombres recorrieron desde Cartagena hasta el sur de Italia, teniendo que afrontar el paso de Pirineos, Alpes y Apeninos. Como los galos, con el paso del tiempo constituían una fuerza altamente profesionalizada, capaz de realizar maniobras complejas como detener la persecución en Cannas de la caballería romana a la fuga e ir a ayudar en el flanco contrario para terminar de cerrar el movimiento doble envolvente que había ideado su general. Las miniaturas con las que los represento son tres referencias distintas de Essex, lo que le proporciona más variedad al conjunto.

Estos hispanos estaban armados con varias jabalinas que presumiblemente arrojaban al enemigo antes de enzarzrse en el cuerpo a cuerpo. Algunas fuentes refieren que los hispanos montaban a la jineta (es decir, con ambas piernas en un lado, como en el siglo XIX se veía montar a las mujeres). En realidad, estos jinetes colocarían una pierna junto a las bridas para tener mayor control sobre el bruto y poder saltar de la montura en cualquier momento. También otras fuentes refieren que podrían viajar más de un jinete por montura o turnarse varios en el uso en la idea de entablar combates de caballería que se terminaban transformando en combates de infantería. De todas formas, no hay seguridad al respecto y en estas figuras no he representado la montura a la jineta (aunque hay otros en proyecto).

También van armados con una falcata que llevan colgada del cinto. Aquí no hay ningún ejemplo, pero por lo que mencionan investigadores modernos, el mejor color para representar una falcata sería un negro acerado, debido a que probablemente éste era el color que tomaban estas armas al verse sometidas a la forja calentada por ramas. Portan un escudo circular pequeño también conocido como caetra. Generalmente iba decorado y estoy a la espera de recibir algunas calcas para atreverme a darle algo de variedad a estos escudos. Sus principales protecciones son de cuero, como el casco y en algunos casos las armaduras. Se ha optado por pintarlos en blanco (más bien colores crudos) por la descripción de Tito Livio que se refiere a los hispanos portando túnicas blancas con ribete púrpura (a ver si me atrevo a hacerlo, pues cuando las pinté en su día no me terminaron de salir del todo bien).