25 de abril de 2011

Baseado Ingenieros alemanes del DAK

Y ahora procedemos al baseado.



Lo primero que hacemos es coger cuatro palillos y los pintamos con Humo de Vallejo. A mi juicio es el mejor tono de madera vieja. Para usarlo conviene aplicar sucesivas capas bastante aguadas. En la parte de arriba aplicamos el color puro para que quede un remate oscuro, como suele ocurrir en ciertos postes desgastados.

Con madera de balsa hacemos el cartel y pintamos a mano alzada la advertencia de minas. Con cianocrilato pegamos cada parte en la base y con algo de plastilina y cola blanca, rodeamos los palillos para evitar que se caigan. Eso debería darles bastante estabilidad pues vamos a andar tirando de ellos. Para asegurar echamos cola blanca y una mezcla de arena de playa y piedrecitas pequeñas de las de los gatos. Aseguraos de colar antes las piedras para que no sean demasiado grandes (un colador o una selección a ojo).

Cuando tenemos seca la arena, procedemos a pintar. Yo he usado una mezcla muy aguada de dessert yellow de GW, un poco de smoke de Vallejo y de negro. Cuanto más negro más se mata el conjunto y peor, pero más contraste. El truco es usar la pintura muy aguada para que nada más posar el pincel, la pintura resbale por el conjunto. Como con nuestro uniforme, inmediatamente generará luces y sombras entre las piedras. Cuando se seque primero un pincel seco de dessert yellow y hueso deslucido de GW. Luego las luces finales sólo de hueso, pero en zonas muy localizadas.

Pasamos a la alambrada. Ahora cogemos una mosquitera metálica. Cortamos un trozo grande a conveniencia de manera que los filamentos sigan en su sitio por presión. Aplicamos algo de cianocrilato a las intersecciones de las tiras de alambre para fijarlas. Cuando está seco el conjunto, cortamos con unas tijeras poco a poco cada tira, limitando el tamaño de las púas de la alambrada.



En los puntos en que la alambrada se enrosca con el poste, retiramos con una cuchilla los trocitos de alambre pegados. Esto lo hacemos para poder enrollar mejor al poste.

Ahora, con un palillo, diseñamos la forma que tiene la parte enrollada. Es tan difícil de explica con palabras como fácil de hacer. Básicamente primero enrollamos sobre el palillo para hacer la forma que queremos para los puntos en que engancha el alambre con el poste. Luego colocamos el primero, lo metemos dentro un poco más abierto, le ponemos un poco de cianocrilato y luego apretamos para que se ajuste y pegue. Así procedemos con toda la alambrada.

El siguiente paso es pintar toda la alambrada de negro. Si hay manchas de cianocrilato sobre el poste de madera, primero le damos un poco de la cera para eliminar el tono blanco. Si no queda del todo bien, repasamos del color. Generalmente el pintado negro de la cinta debería disimular esto.



Una vez seca nuestra alabrada negra, le damos un pincel seco en metalizado bolter por toda la superficie. Posteriormente otro en naranja con un punto de marrón por algunos puntos para simular algo de envejecimiento. Y éste es el resultado final tras decorar la peana con algunos tufts de Model Scenic.






Aún se le pueden añadir unos cuantos detalles más a las peanas, que aún estoy calibrando, pero básicamente están listos para desminar los campos de batalla. Para quien quiera verlos en más detalle, a continuación un par de fotos que se pueden agrandar más.









3 comentarios:

Alvar_g dijo...

Una pasada, las bases, tengo intencion de copiartelas si no te es un problema, pero me encanta el efecto de desierto pedregoso.

¿LA cola la echas sin diluir, y le mezclas la arena y las pidrecitas de arena de gatos todo junto?, ¿o pones la cola y luego vas poniendo lo demás?

Saludos

Óliver dijo...

Perdón por tardar tanto en responder, pero tenía un poco dejado el blog hasta el punto de que se me habían caído todas las fotos. Efectivamente la cola la echo sin diluir mucho (ayuda que sea cola blanca que tiene un año o así para que no esté demasiado líquida).

En una cajita de plástico tengo la mezcla ya hecha de piedras y arena. Si usas piedrecitas de arena de gato, procura colarlas con un colador para que no te entren piedras demasiado grandes. Las grandes las elijo y voy poniendo según la necesidad.

Óliver dijo...

¡Ah, y encantado que las copies: es todo un honor!